Por Sin Reservas
El jurista mexicano Diego Valadés, presidente del Instituto Iberoamericano del Derecho Constitucional, dictó la conferencia magistral intitulada “Experiencias y lecciones de una constitución centenaria”.
Valadés, exholtó sobre la importancia de que debemos tratar por todo los medios de «no formar parte de aquellos que siempre tienen un motivo para modificar la Carta Magna», ya que esto debilita ese instrumento que debe seguir siendo y viéndose como el documento imperio en pro de preservar el documento jurídico más transcendental que han parido las sociedades.
Al tiempo que llamó a los dominicanos, especialmente a aquellos que tienen el poder de hacer cambios sociales que sigan los caminos hacia el fortalecimiento constitucional, ya que las sociedades se desarrollan cuando tienen instrumentos jurídicos capases de dar garantías y seguridad a todos los actuantes.
Hizo gala de su grandioso manejo de los temas orientado no solo a los de origen o actualidad en México, sino también para Latinoamérica, habló con propiedad de los tres latino que a su entender forjan el idealismo nacionalista de nuestros pueblos, mencionando a Pedro Henríquez Ureña, José Martí y Eugenio María de Hostos, en estos pro hombres están consumadas todas las grandezas que como seres humanos podamos encontrar, para seguir hablando de patria en sentido general.
La constitución centenaria tuvo sus orígenes en Querétaro, donde se redactó la Constitución de 1917, uno de los treinta y un estados que, junto con la Ciudad de México, forman los Estados Unidos Mexicanos.
Es un estado con un creciente índice de desarrollo industrial y acelerado desarrollo empresarial. Contiene varios sitios declarados Patrimonio Cultural de la Humanidad por la Unesco en 1996, y se considera Cuna de la Independencia de México.
El doctor Valadés, reflexionó más de una vez en la importancia de preservar las constituciones, solamente haciendo valer el sagrado y único deber para que estas sean cada vez más respetadas, más fortalecidas para poder seguir haciendo posible estados verdaderamente sociales y respetuosos de los derechos fundamentales de los hombres y mujeres que habitan un territorio.
Hablo muy claro de que esa Constitución de Querétaro fue la que viabilizó sacar de la pobreza a millones de mexicanos, darles la libertad como seres humanos, y decirles que ellos eran los verdaderos dueños de los sueños mexicanos.
El doctor Valadés expresó en su exposición el gran amor por este pedazo de tierra llamada República Dominicana. En virtud de los lazos que unieron a su tío Fernando Valadés, cantante de gran admiración por los dominicanos especialmente de las décadas de los 50, 60 y 70.
La actividad fue auspiciada pote la Suprema Corte de Justicia, con la colaboración del Instituto Dominicano de Derecho Procesal Constitución (IDPC), la unidad Académica de la Suprema Corte de Justicia, la Escuela Nacional de la Judicatura (ENJ) y la Academia de Ciencias de la República Dominicana.
Estuvieron, Mariano Germán Mejía, presidente de la Suprema Corte de Justicia; magistrado Hermógenes Acosta, Instituto Dominicano de Derecho Procesal Constitucional (IDPC); magistrado Manuel Ramón Herrera Carbuccia, de la Unidad Académica de la Suprema Corte de Justicia; Gervasia Valenzuela Sosa, de la Escuela Nacional de la Judicatura (ENJ), Marino Mendoza y Luis Sheker Ortíz, Academia de Ciencias de la República Dominicana.
Imagen: Hermógenes Acosta, Diego Valadés y Laddy Cortorreal E.